domingo, 20 de agosto de 2017

Sigue nadando aunque vengan gentes corrientes.

Has sido eres y serás como has sentido y elegido a cada momento.

Por diferentes situaciones. En distintas circunstancias.
Agradécete a ti mismo haber sido tú.

Te lo he dicho mil veces, porque en su día lo aprendí de un titán.
"El clavo que sobresale es el que recibe martillazos".
He aprendido de ti en este tiempo mil cosas, he crecido como persona, y lo seguiré haciendo porque ya formas parte de mi vida y como de la mía de la de otras muchas personas.
A veces no eres consciente o puede que te subestimes o no lo recuerdes, pero para eso estamos.
Tu gente es la que tu eliges día a día estando cerca o en la distancia. Es la que te demuestra, la que te dice lo bueno y lo malo por tu bien.

Sólo la resistencia implica presión. Lo que no ofrece resistencia está muerto de mil maneras.

Los diamantes se vuelven fuertes y brillantes después de soportar una presión increíble.
Poco a poco nos hacemos diamantes.

Tu me dijiste que brillaba, y que hay gente que prefiere intentar apagar que brillar o ver brillar alguien.
Y así es.
Hay quien cuando aparece en un lugar destella, no sabes cómo pero de alguna manera su presencia se nota.
Ése eres tú.
Eres una persona justa. Sería injusto que subrayes a quien solo merece un punto y final.
Si alguien quiere estancarse es su decisión, y es la tuya y la acertada seguir fluyendo.

Espero que de todo aprendas y seas capaz de valorar la calidad de tu equipaje.

Me da lástima la gente rencorosa, se castiga día a día con su rencor.
Si piensas objetivamente eres afortunado y la sonrisa es un arma de destrucción masiva.

Sigue nadando, sigue nadando, aunque vengan  "gentes corrientes".